ALMA GEMELA

QUÉ SON LAS ALMAS GEMELAS


Hay una gran distorsión de la realidad que son las almas gemelas.

Siempre nos han enseñado que las almas gemelas son dos mitades de un alma, que se buscaban para volver a unirse .

Lamentablemente,  eso es crear en el ser humano una dependencia afectiva.  Todo lo contrario de lo que es la autorrealización.

Popularmente se cree que cada ser humano es una mitad en busca de su otra mitad, masculina y femenina, y que después de muchas vicisitudes, ambas partes se encontrarán y vivirán por siempre felices.
Lo siento mucho pero esto es un cuento infantil. En el plano espiritual no hay diferenciación sexual, no existe el sexo.

También nos explicaban que las almas gemelas eran dos almas tan iguales que, cuando encarnaban en el plano físico, siempre eran de distinto sexo para poder ejercer una atracción recíproca.
Otra mentira que nos enseñaba a necesitar, a ser dependientes de un amor personal.  Sabiendo que,  al no necesitar, podíamos  utilizar toda nuestra energía.

Al mostrarnos  la teoría  de esa manera  nos indicaban  todo lo contrario del genuino  camino espiritual, que explica que el  verdadero  amor no necesita,  porque es  Amor de Servicio. Es el amor del emperador en oposición al amor del mendigo. El emperador da lo que necesitas el mendigo da lo que le sobra.
Eso es el Amor con mayúsculas.

Porque el amor personal  que damos  y recibimos a diario se alimenta de emociones negativas difíciles de controlar, de dudas, de celos, de diversos roles de control  entre uno y otro protagonista de ese sentimiento.
Por el contrario, el Amor Impersonal o de Servicio no intenta manipular ni busca dominar a la persona  a la que va dirigido ese afecto,  sino que trata de serle útil...  pues no importa uno, sino el otro.

Pero para brindar ese amor tan elevado, no es necesario buscar la excusa de que somos la mitad de un todo  y la otra mitad  es aquel ser a quien tenemos que amar.

La respuesta es más sencilla y menos egoísta.

Las  almas gemelas no  son  dos  partes  de  un mismo  espíritu.
Tampoco son necesariamente espíritus de distinto sexo, pues los espíritus no tienen sexo.

La teoría espiritual explica que las almas vibran en forma sutil o en forma densa, de acuerdo a su altruismo  o egoísmo ( y muchas otras variables más, pero por no salirme del tema, tendremos en cuenta solo el nivel de dominio del ego o egoísmo).  Cada vibración de un ser es distinto al otro. No hay 2 almas con la misma melodía  pero hay espíritus que tienen vibraciones más afines que otros.
Hay almas  que vibran  en  la misma sintonía. Son espíritus cuya vibración está en resonancia. Significa que el resultado de sus vibraciones individuales  resulta amplificado.
Si dichos espíritus fueran sonido, se podría decir que son ondas acústicas de la misma frecuencia y amplitud.
En música, vibrar en resonancia, significa estar acorde en la escala tonal. O sea, si pulsas la cuerda de una guitarra y hay otra guitarra que está afinada en la misma sintonía, su cuerda también vibrará al estar en resonancia con la del primer instrumento.
La definición correcta  es que un alma gemela es un espíritu que vibra en un acorde determinado, producido en repercusión con otro espíritu, y cuyo resultado es una melodía más intensa.

Los espíritus son similares a formas de luz, que vibran de acuerdo a sus sentimientos, pensamientos y comportamiento. Cuando un espíritu vibra en forma similar a otro, se puede decir que están en resonancia. Su sintonía es similar. Esa es la verdadera explicación de las almas gemelas.

Pero sería demasiado pobre el mundo espiritual si solo otro ser tuviera nuestra misma vibración.
Se sabe que es ilimitado el número de espíritus que tienen la misma sintonía. De esa manera, al estar encarnados, la posibilidad de conocer un alma afín es muchísimo mayor.

El dilema es que mientras exista el ego no hay garantía de nada, pues éste nos hace actuar como protagonistas en una Obra, volviéndonos susceptibles, incapaces de escuchar al otro y envolviéndonos en nuestros propios dramas. De esa manera, nuestra vibración cambia con el ego de turno  y ya no somos una melodía definida, sino una amalgama de ruido.

Es muy importante aclarar otro equívoco.
Hay otra creencia errónea que sostiene que  las almas gemelas son siempre dos.  Esto no tiene que ser necesariamente así,  ya que puede haber muchos espíritus  que vibren en una misma frecuencia.
Creer  que  solamente dos  son  las almas que pueden estar en resonancia entre sí,  es limitar  la afinidad de los espíritus.

De todos modos, es importante destacar que en los Espíritus de Luz  la afinidad  es matizada  por un amor de servicio  y no  por  un sentido de posesión.

Pero las almas gemelas no necesariamente están en un plano de Luz.  Hay espíritus regidos  por la crueldad  que  se encuentran  en  los  planos más densos... y también son afines entre ellos. No se conocen entre sí, pero se comportan  de la misma manera.  Poseen  la misma mezquindad,  tienen similar egoísmo y, en algunos casos, hasta su carácter es parecido.  Pero, a diferencia de los espíritus de Luz, estas almas  aún siendo compatibles, pueden llevarse mal entre ellas.

Eso demuestra  que  no siempre  las almas gemelas  se aman  entre  sí... ¡aquellos espíritus invadidos por el ego sólo se aman a sí mismos!

Con respecto a  las afinidades, las almas gemelas solo tienen afinidad verdadera en  los  planos de Luz, porque  en  los  planos inferiores, su resonancia no es garantía de compatibilidad.
Entonces el mayor problema con las almas gemelas, es el ego. El yo que vive necesitando, el yo que no está completo si no interactúa con el yo de la otra persona. Creernos la mitad de otra alma es un rol como cualquier otro, como sentirnos víctimas de una circunstancia.

En el mundo espiritual no hay roles, porque no hay personalidad definida. Cada espíritu es igual a otro, sólo los diferencia su afán de Servicio. Aquí somos hombre, mujer, padre, tío, amigo,…papeles a interpretar que terminan cuando cae el telón.
Cuando morimos, muere el personaje, pero el actor-espíritu que lo encarnó sobrevive.
Para estar ante el alma gemela han de darse ciertas condiciones de desarrollo evolutivo o al menos de dominio del ego.

Una vez intentado aclarar y explicar exactamente que son las almas gemelas. Intentaré explicar cómo se siente cuando estás ante un alma gemela.
Es tan sólo un segundo, y no hace falta una conversación larga, y esa certeza es instantánea.  Esto es recíproco y puede que no seas consciente o no quieras ser consciente de ello, pero es así.
Un segundo, un instante, dos palabras musitadas y apenas el esbozo de una leve y sutil sonrisa.
Las almas gemelas se conectan, ambos sienten esa conexión, son partícipes de que son el uno como el otro y que indiscutiblemente, deben cumplir juntos su misión. Aunque la conexión no se realice en los primeros encuentros.
Dos cuerpos, dos mentes y dos almas unidas por y para una causa (dirección).
Esa sensación, se nota, se siente y es inexplicable como una gran energía que te recorre, te llena y en ese instante te das cuenta de que esa conmoción es única e irrepetible; aunque puede haber falsas alarmas, pero se quedan en eso en falsas.
Una mirada, dos cómplices, en un lugar, todo se transforma y todo se vuelve inexplicable, indescriptible pero real y tangible, aunque no se pueda palpar.
Piensas, meditas, sonríes, ríes y te das cuenta de que ese suceso es mutuo, recíproco y evidente.
Se reconoce, se sabe, se aprecia, se atisba pero se obvia el instante maravilloso del encuentro eterno, infinito y único.

Sucesos acontecidos, circunstancias no propicias, todo se va desarrollando no muy propiciamente y la dificultad puede dar lugar a hechos de inminente rebeldía y de lucha constante e incesante.
Las mentes son rápidas, audaces y es entonces cuando, vorazmente ese sentimiento va creciendo y se adueña de ti. Se apodera de tu persona, ilumina todo tu ser, y tu cuerpo emana esa luminosidad y ese aura fantástico. Tu alma se hace inmensa y tu corazón es un latir constante y ensordecedor, transmisor de sentimientos y sensaciones perpetuas y no muy fácilmente sostenibles. Fuera del espacio y del tiempo se siente único, mágico y tal vez aterrador dado el nivel de energía que se manifiesta.

A todos los que no hayáis encontrado aún un alma gemela deciros que eso no se busca, te encuentra.